La mujer de rojo
camina sin fin
dispuesta a la luz llegar
pero la oscuridad la rodea
el camino se hace eterno
solo al final del camino
hay un atisbo de esperanza
la luz se abre camino
le cueste lo que le cueste
llegara a vivir en la luz
dejando la oscuridad atrás
como parte de su pasado.
Ilustración de Francisco Portacelli.
La vida no nos lo suele poner fácil, pero somos nosotros lo que debemos cree en nuestros objetivos y en nosotros mismos.
ResponderEliminarSaludos Beatriz.
Muchas gracias amigo, que seas muy feliz. Un abrazo
EliminarSiempre hay luz al final del camino...
ResponderEliminarMuchas gracias por comentar. Un abrazo
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