viernes, 2 de enero de 2015

Un mundo para los dos.

Su mirada alimentaba los más oscuros deseos que mi corazón ocultaba, era el motor de mis alas para perseguir todos los sueños que con su sola presencia me inspiraba .
Su mirada es el bálsamo que necesitan las heridas de mi alma para cicatrizar y volver a creer que existe la bondad como la que transmite su forma de mirar.
Su forma de mirarme al hablar conmigo cada día me daba un motivo para soñar con un mundo mejor , con sueños por cumplir y con un mundo donde él y yo no solo charlemos sino creemos un mundo para los dos.






 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario